No se puede hablar de Punta Hermosa sin hablar de la trattoria Don Angelo, parada obligatoria y emblemática para todo veraneante o residente de este balneario. Fundada hace 24 años por Angelo Cicala Carella, comenzó como una bodega pequeña en donde se ofrecía menú a los tablistas y lugareños hasta que con los años se convirtió en un lugar famoso por sus pastas, su comida marina y, por supuesto, su riquísima torta de chocolate.

Actualmente, Don Angelo, está comandada por Gianfranco Cárdenas Cicala, nieto del fundador, y quien debió enfrentar la dura época de la pandemia, pero que, además, se ha decidido a dar un nuevo y desafiante paso: abrir una dark kitchen en Lima con el fin de expandir la marca.

Fetuccini mediterráneo - Don Angelo

Dark Kitchen para nuevos retos

Abrir una Dark Kitchen o cocina oculta en Lima es una de las formas de desafiar un 2022 lleno de cambios, pues, aunque la pandemia fue dura para Don Angelo, la cuarentena y el hecho de que los limeños se refugiaran en el sur, significó buenas ganancias para el negocio. “Este año, en cambio, con todos volviendo a la presencialidad, hemos sentido un bajón en los negocios”, afirma Gianfranco.

Así, Gianfranco aprovechó que su familia contaba con un local propio en Surco, lo acondicionaron y desde allí empezaron a preparar los pedidos que repartirían para las zonas aledañas. “Empezamos en junio con platos de pastas, algunas comidas criollas y postres. Para mi sorpresa, en poco tiempo estamos vendido más del delivery que vendemos actualmente en Punta hermosa”, cuenta Gianfranco.

Los platos que más piden los limeños son las medias pastas al pesto, al pomodoro, en salsa huancaína, etc. Acompañados con filete de pollo, apanados y otras carnes. También las lasañas, los canelones y, por supuesto, la emblemática torta de chocolate.

Apanado Napolitano - Don Angelo

El secreto del éxito

Gianfranco Cárdenas tiene claro que hay 3 razones por las cuales la suerte les está sonriendo en su aventura limeña: “la gente ya nos conoce, muchos de nuestros clientes que van al sur nos suelen pedir todas las semanas; el tamaño y la calidad de nuestros platos son una garantía y, sobre todo, la rapidez con que enviamos el pedido”, señala.

Con el tiempo, aclara, esperan colocar más platos como pizzas o comida criolla. Difícilmente llegarán a competir con los más de 200 platos con los que cuenta la carta actual de Don Angelo en Punta Hermosa, pero se trata de dar más opciones para el paladar.

Un próximo restaurante en mente

Si de algo se ha dado cuenta Gianfranco durante este tiempo, es que los restaurantes no han perdido su encanto sino, por el contrario, lo han acentuado. “Al menos unos 7 de 10 clientes nos piden que abramos un restaurante en Lima”, nos cuenta. Algo que él y su familia están evaluando seriamente.

Y es que un Don Angelo en la capital, aunque signifique mayor inversión, tendría muchas ventajas: “un ticket mayor, una comida mejor conservada y una experiencia sinigual”, añade.

Canelones - Don Angelo

De generación en generación

Aunque Gianfranco Cárdenas empezó a liderar la empresa familiar desde el 2015, él lleva inmerso en el restaurante desde los 9 años, atendiendo mesas, lavando platos, cocinando, entre otras obligaciones. Lo que le ha dado la suficiente experiencia tanto para cocinar como para administrar o, en sus palabras “hacer lo que haga falta”.

Torta de chocolate - Don Angelo

El próximo rumbo de Don Angelo en Lima aún no está definida, aunque el éxito va por buen camino. “Estamos pensando en abrir otra Dark Kitchen en La Molina para cubrir otras zonas de Lima o quizás un restaurante. El tiempo dirá cómo nos expandimos”, puntualiza.