El proceso de reclutamiento y selección de personal está atravesando una etapa de profunda transformación impulsada por la digitalización y la inteligencia artificial (IA). En un contexto laboral cada vez más competitivo, las organizaciones buscan optimizar sus estrategias de atracción de talento mediante herramientas tecnológicas que prioricen la eficiencia y la experiencia del candidato.

De acuerdo con el informe LinkedIn Global Recruiting Trends 2025, más del 75 % de las empresas en Latinoamérica ya incorporan tecnologías de IA en alguna fase del proceso de selección. Estas soluciones se utilizan principalmente para filtrar postulaciones, automatizar entrevistas y evaluar la compatibilidad cultural entre el postulante y la organización. Este avance no solo acelera los procesos, sino que también redefine la manera en que las empresas establecen conexión con las personas.

“La evolución del proceso de selección ha sido disruptiva y estratégica. La incorporación de tecnologías avanzadas y soluciones basadas en Inteligencia Artificial ha permitido migrar de modelos operativos tradicionales hacia sistemas inteligentes, centrados en la experiencia del talento”, explicó Verónica Sánchez Espinoza, representante del Grupo EULEN Perú. Según detalló, el uso de IA permite priorizar perfiles administrativos, especializados y técnicos con mayor precisión, incluso en escenarios de alta rotación o escasez de talento.

Reclutamiento digital en Perú: oportunidades y desafíos

En el mercado laboral peruano, la digitalización ha transformado la gestión del talento al reducir los tiempos de cobertura de vacantes y mejorar la trazabilidad del proceso. Las plataformas que integran algoritmos de IA facilitan la evaluación de candidatos de manera más objetiva, optimizando el filtrado de perfiles y automatizando tareas repetitivas.

Para los especialistas en gestión de talento, el verdadero valor de la tecnología radica en su capacidad de generar eficiencia sin perder el enfoque humano. La automatización permite a los reclutadores concentrarse en lo esencial: conocer al candidato, valorar su potencial y acompañarlo durante el proceso de incorporación.

Asimismo, la digitalización ha promovido una mayor inclusión laboral, ampliando el acceso a oportunidades para postulantes de distintas regiones mediante plataformas virtuales. El análisis de datos, por su parte, contribuye a identificar zonas con alto potencial de talento y a adaptar horarios o modalidades según la disponibilidad de los candidatos, promoviendo una gestión más empática y sostenible.

No obstante, el desafío para las empresas será mantener el equilibrio entre tecnología y cercanía humana. “La tecnología debe servir para conectar con las personas, no reemplazarlas”, enfatizó Sánchez, subrayando la necesidad de avanzar hacia modelos ágiles y centrados en las personas.

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